Nombre del tema: “The long and winding road”
Artista: The Beatles
Fecha de lanzamiento: 11 de Mayo de 1970
Pequeña reseña histórica: No es el objetivo de estas líneas
narrar la historia del cuarteto más famoso y fabuloso de todos los tiempos.
Pero esta canción constituyó el punto final para una carrera de diez años, o
más de siete discográficamente hablando. Un mes antes el mundo de la música
recibía el mazazo de saber que Los Beatles no existían más. Se habían separado.
“El largo y sinuoso camino” (así se lo conoció en Argentina) ya había salido
como tercer track del lado B de su último álbum Let it be, tres días antes, el
8 de mayo. El 11 del mismo mes se editó como single siendo el último de la discografía
oficial. Hace exactamente 50 años, medio siglo. La autoría es de Paul
McCartney, y esta versión no fue para nada de su agrado, ya que habiendo sido
grabada más de un año antes y quedado olvidada en el marco del proyecto “Get
back sessions” de enero de 1969, se reflotó, derivando el titánico trabajo de
edición al que ya entonces era una leyenda, Phil Spector. Este fue el encargado
de meter arreglos de orquesta y coros, dándole ese tono espectral. Pero Paul la
prefería pelada, o casi (en 2003 se desquitó sacando “Let it be naked” con la
versión que él hubiera preferido). Como sea, la versión de Spector es, a mi
gusto, maravillosa, y constituye el réquiem perfecto. Simplemente una opinión.
El dato autorreferencial: Uno de mis recuerdos más
tempranos, es haberla escuchado por primera vez, en la TV, porque era la
canción principal de una novela de Arnaldo André, probablemente Piel naranja
(yo era muy chico, la veía mi madre. Sí reconozco haber visto Amo y señor, esa
no me la perdía, pero ya era más grande entonces). Ya a mis once años la pude
escuchar con atención, cuando mi prima Sandra, que era y es, 6 años mayor que
yo, me prestó Let it be en vinilo. Años más tarde cuando conseguí el VHS del
film homónimo, pude conocer la versión que McCartney prefiere. Y en el ´84 al
salir “Broad Street” de Macca, la volvió a grabar, tal era su obsesión con esta
gema. A mí me encanta, aunque no es ni por léjos mi canción favorita de los
Pickles. La incluí en esta colección, como recordatorio por su 50º aniversario.
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